¿Qué vas a contarme y cómo? A principio de mes, hablábamos sobre nuestra búsqueda insaciable de historias en lugares abandonados. Nos imaginamos qué sucedió y cómo.

Pero en un proyecto es diferente. Por ello, hoy como excepción, nos vais a permitir hablar de nuestro estudio. De como a veces los proyectos llegan descarrilados, sin una historia detrás o como otras veces tienen tanta historia que no sabemos cuál elegir.

Primero hablaremos de los que llegan sin padres. En esos proyectos, nos encontramos una idea técnica y sin alma en la cual tenemos que indagar, comparar y buscar un porqué. Ese porqué generará una atmósfera, un ritmo y una historia que quizás, con el tiempo, llegue a un lugar donde nadie esperaba verlo. ¿Un ejemplo? Ahora estamos trabajando una web educativa y lo que comenzó como una web para divulgar información, finalmente podría evolucionar a una forma de lenguaje y comunicación aplicada a las aulas.

¿Y las ideas que ya van de la mano de una historia? Esas hay que darles un giro, buscar la mejor manera de contarlas y aunque la historia te la sepas o te la hayan contado mil veces, buscar para sacar más información y seguramente en el trayecto, encontremos la mejor manera de relatarla.